Amigos, en esta nueva etapa quisiera compartir este mundo de creatividad, comenzando por contextualizar el concepto.
El tema de la creatividad ha sido estudiado por muchos investigadores. Francis Galton en 1869 en su obra Natural Nurtur, subrayaba que la propia naturaleza o conjunto de dotaciones innatas del individuo era un factor determinante del éxito en la vida. En 1931, Robert Crawford tuvo en mente la búsqueda de métodos capaces de promover y sistematizar la intuición, la inventiva, la capacidad de improvisar y los procedimientos de solución de problemas. Sigmund Freud contribuyó a la creatividad argumentando la importancia de los procesos inconscientes y comparando la vida del niño, el adulto soñador y el artista creativo. Los estudios de la creatividad toman importancia en 1950, cuando J.P. Guilford dio una conferencia respecto a la creatividad ante la American Psychological Association. Poco después Alex Osborn publicó su obra Applied Imagination, y al año siguiente, fundó la Creative Education Foundation.
Dentro del campo del desarrollo de las habilidades de pensamiento destaca la obra de los autores Edward de Bono (1967) y Howard Gardner (1982) con sus teorías como el pensamiento lateral y las inteligencias múltiples, respectivamente. La segunda ya se ha analizado, mientras la primera será revisada brevemente. Pero, entonces ¿Qué es creatividad?
A mi experiencia de 12 años de trabajar con este tema y haber cursado un máster de Psicocreatividad en la Universidad Autónoma de Barcelona UAB, podría definirlo de una forma sintetizada como la capacidad de resolver problemas de forma divergente y lateral, que esto se resume en un proceso de pensamiento que puede llegar o no a la innovación, que esta discusión la trataré en otro post.
Bueno y ¿Qué piensa otros autores respecto a este término?
Primeramente Guilford en 1967, ha estudiado la creatividad mediante el análisis cualitativo de las personas creadoras. Afirma que la creatividad es la combinación de dos tipos de pensamiento: el convergente y el divergente. El primero está relacionado con lo que se denomina conocimiento base: la reproducción y memorización de los aprendizajes y hechos. El pensamiento divergente implica utilizar el conocimiento previo con mucha pericia.
Paul Torrance (1974) después de varios años de estudio, siguiendo la línea de Guilford, consideró que la creatividad es un factor independiente de la inteligencia general y crean una batería de test para medir las realizaciones creativas. Para este autor, la creatividad es un proceso por el cual una persona es sensible a los problemas, a los fallos, a las lagunas del conocimiento y a las desarmonías en general. La persona creativa es aquella que sabe identificar las dificultades de las situaciones, buscar soluciones mediante caminos que otros no encuentran, hacer conjeturas, formular hipótesis, modificarlas, probarlas y comunicar los resultados.
Para Mihalyi Csikszenmihalyi (1998) es piedra angular para la comprensión de la creatividad la aceptación de que la misma se refiere a un proceso que resulta en una idea producto que es reconocida y adoptada por otros. La creatividad no es un producto de individuos aislados sino de sistemas sociales emitiendo juicios sobre productos individuales. Csikszenmihalyi lo define en su Modelo de Sistemas.
Csikszenmihalyi fundamenta que el individuo creativo opera en un ambiente que posee dos aspectos salientes: un aspecto cultural llamado dominio y un aspecto social denominado ámbito. Estos dos aspectos tiene que ver con los parámetros que en el siguiente epígrafe se explican.
Como ven la creatividad tiene amplio espectro en cuanto a definición y aplicación, y como lo había mencionado, es el principio para desarrollar proyectos innovadores.
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